By El abogado Ángel Martínez, parte de la defensa del expresidente Juan Orlando Hernández, se quejó de la forma en que su representado fue trasladado este martes a la audiencia de presentación de pruebas en la Corte del Distrito Sur de Nueva York.
“Mi cliente no se transportó solo. Se sentía incómodo en esa gran multitud. Es el ex presidente de Honduras. Algunos en el transporte pueden haber sido parte de un grupo terrorista…”, dijo ante el juez Kevin Castel.
De acuerdo con la información desde New York, Juan Orlando Hernández entró a la sala de audiencias con el uniforme de prisionero, acompañado del investigador Ángel Martínez, miembro de su equipo de defensa.
La Fiscalía estadounidense comunicó al juez Kevin Castel por medio de un asistente, que “hemos realizado cinco producciones de descubrimiento, grabación de reunión con co-conspiradores, extracciones de pruebas electrónica”.
Además, se reveló que tienen en su poder libros con cantidades de drogas, más una suma importante de información para presentarla en el juicio, pero la información clasificada podría ser presentada antes del 1 de febrero del siguiente año.
Por su parte, el abogado defensor de JOH, Raymond Colon, criticó los problemas de audición, debido al ruido de la cárcel en donde permanece el expresidente y no escuchaba por los auriculares. En respuesta Castel le dijo: “Póngase en contacto con el director del MDC (centro de reclusión) y dialogue sobre qué marca y modelo de auriculares y por qué los necesita. Pero con respecto a las grabaciones, ¿Estados Unidos les proporciona borradores de traducción?”.
Posteriormente, el abogado Colon contestó que “algunos, que se remontan a 8 o 9 años”, además de que “el inglés de mi cliente (JOH) no es malo, los resúmenes están en inglés. Pero hay omisiones en los resúmenes”.
El abogado también solicitó al juez Castel la posibilidad de tener mayor acceso a exmandatario. “El descubrimiento es voluminoso, tenemos una orden de protección. He guardado todos los materiales. No dejo ninguno de los materiales con él. Pero necesita poder mirarlo cuando no estoy allí”, comentó.
Confidencialidad en las pruebas
Meses atrás, la Fiscalía del Distrito Sur de New York presentó una solicitud al juez Kevin Castel para que declarara confidenciales algunas pruebas contra JOH, adicionales a otras que se encuentran bajo reserva.
En consecuencia, el juez Castel autorizó la secretividad de la evidencia que será presentada durante el juicio y entre la que se incluye la transcripción de intervenciones telefónicas, que contienen, entre otras cosas, una conversación por texto entre dos narcotraficantes vinculados a su hermano, el excongresista Juan Antonio “Tony” Hernández, quien fue sentenciado en 2021 a cadena perpetua más 30 años de prisión por narcotráfico.
Anteriormente, el juez Castel ordenó que las pruebas que se presenten en el juicio por narcotráfico contra Hernández sean confidenciales luego de una solicitud presentada por los fiscales acusadores y la defensa del exmandatario hondureño.
La petición indicó: “El material de divulgación designado como material protegido o material delicado no será divulgado por el acusado o su abogado, incluido cualquier abogado sucesor y será utilizado por la defensa únicamente para fines de defensa de este caso”.
El caso contra JOH
El expresidente Juan Orlando Hernández es responsable de “participar en una conspiración de corrupción y tráfico violento de drogas y propiciar la importación de miles de kilos de cocaína a los Estados Unidos”, según la Fiscalía de aquel país.
Los cargos imputados son; conspirar para introducir cocaína a Estados Unidos, usar y transportar ametralladoras y explosivos para el traslado de la droga y conspirar para traficar drogas. En resumen, EEUU acusa al expresidente Hernández de traficar 500 mil kilogramos de cocaína desde el 2004 al 2022.
La magnitud de los delitos es grave, pues de ser culpable, la sentencia sería de cadena perpetua en una cárcel norteamericana.
Fue el pasado 21 de abril cuando JOH fue extraditado a Estados Unidos, bajo un fuerte operativo policial.
