By El jefe de la bancada del Partido Nacional, Tomás Zambrano, y el diputado Antonio Rivera Callejas interpusieron una denuncia por persecución política ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en Washington.
El hecho fue cuestionado ampliamente por el ministro de la presidencia, Rodolfo Pastor, quien lo catalogó como un “show político”.
El alto funcionario expresó que “enfrentar la justicia eso no se llama persecución, ellos tienen el derecho de hacer y decir lo que quieran, ahorita fueron para allá a ver quien los escucha”.
En el documento, explican que “las acciones que se desarrollan con el objeto de generar un clima de amedrentamiento que desincentive la participación política, lo cual se traduce en una grave afectación al funcionamiento de la democracia, poniendo en riesgo nuestros derechos a la libertad personal, el derecho a la vida, a la integridad y el derecho a la participación política”.
Además solicitaron de carácter urgente, “el otorgamiento de medidas cautelares para prevenir daños irreparables, por encontrarse en grave riesgo el derecho a la libertad de expresión, derecho a la vida, integridad personal, libertad personal y el derecho a la participación política de diputados que forman parte de partidos de oposición en Honduras”.
Por su parte, Zambrano manifestó que “presentamos la denuncia, documentos e información ante la CIDH”.
“Romeo V, Julieta C, Marlen A, Salvador N,Yuri S, Mauricio V, Tomas Z, Toño R, Yani R,Tito A, Mario S, Nelson M, Marlon L, Rey S y otros”, son los nombres de las personas con las que supuestamente el oficialismo tendría represalias.
Incluso, Zambrano adelantó que se están fraguando acusaciones inventadas para perjudicar a estas personas. “Están desesperados”, aseguró el diputado por el departamento de Valle.
Hasta el momento la presidenta de Honduras no ha respondido a esta denuncia, tampoco su esposo y asesor presidencial, Manuel Zelaya, ha reaccionado.
