Las acciones estadounidenses se encaminaban a una fuerte liquidación este lunes por la mañana después de que un avance sorpresivo de una empresa china de inteligencia artificial, DeepSeek, amenazara el aura de invencibilidad que rodea a la industria tecnológica de Estados Unidos.
DeepSeek, una startup que existe hace un año, reveló una capacidad sorprendente: presentó un modelo de IA similar a Chat GPT, llamado R1, que tiene todas las capacidades conocidas y opera a una fracción del costo de los populares modelos de IA de Open AI, Google o Meta. La compañía dijo que había gastado solo US$ 5,6 millones en entrenar su modelo de IA más nuevo, en comparación con los cientos de millones o miles de millones de dólares que las empresas estadounidenses gastan en sus tecnologías de IA.
Esto causó una conmoción en el sector tecnológico. La semana pasada, Meta dijo que gastaría más de US$ 65.000 millones este año en el desarrollo de IA. Sam Altman, CEO de Open AI, dijo el año pasado que la industria de la IA necesitaría billones de dólares en inversiones para respaldar el desarrollo de los chips de alta demanda necesarios para alimentar los centros de datos que consumen mucha electricidad y que hacen funcionar los complejos modelos del sector.
El sorprendente logro de una empresa emergente de inteligencia artificial relativamente desconocida resulta aún más impactante si se considera que Estados Unidos lleva años trabajando para restringir el suministro de chips de inteligencia artificial de alta potencia a China, alegando preocupaciones de seguridad nacional. Eso significa que DeepSeek pudo lograr su modelo de bajo costo en chips de inteligencia artificial de baja potencia.
Las acciones tecnológicas estadounidenses sufrieron un duro golpe este lunes por la mañana. Nvidia , el principal proveedor de chips de inteligencia artificial, cuyas acciones se duplicaron con creces en cada uno de los dos últimos años, cayó un 12% en las operaciones previas al mercado. Meta y Alphabet , la empresa matriz de Google, también cayeron drásticamente, al igual que Marvell, Broadcom, Palantir, Oracle y muchos otros gigantes tecnológicos.
Eso impactó en el mercado de valores en general, porque las acciones tecnológicas representan una parte importante del mismo: las tecnológicas constituyen alrededor del 45% del S&P 500, según Keith Lerner, analista de Truist. Los futuros del S&P 500 iban camino de caer un 2,4% en la apertura del mercado y el Nasdaq, con gran peso tecnológico, iba a abrir con una baja del 4,2%. El Nasdaq no cierra con una baja del 4% desde septiembre de 2022. El Dow iba camino de abrir unos 400 puntos, o un 0,9%, con una baja.
Esta semana comienza una serie de informes de ganancias de empresas tecnológicas, por lo que su respuesta a la sorpresa de DeepSeek podría generar movimientos tumultuosos en el mercado en los próximos días y semanas.